Candidata latina impugnada podría quedar fuera de elección en Cícero

La disputa por la Alcaldía de Cícero, ciudad vecina a Chicago habitada por un 87 por ciento de latinos, podría dejar por el camino a la candidata mexicoamericana Lizveth Méndez, quien fue impugnada y corre el riesgo de no poder disputar los comicios del mes próximo.

"Sigo candidata a la Presidencia de Cícero", dijo hoy Méndez en un comunicado enviado a Efe, a pesar de la impugnación presentada el mes pasado por su lugar de residencia y las firmas que presentó de respaldo.

Ante noticias de que el actual Presidente Municipal, Larry Dominick, ganó la demanda presentada contra su candidatura, Méndez dijo que la decisión oficial de la Junta Electoral se divulgará el domingo, "y vamos a apelar", por lo que no se considera fuera de la elección.

Méndez, de 37 años, quiere ser la primera mujer al frente del Gobierno de una ciudad con 83.000 habitantes, en su mayoría inmigrantes mexicanos y centroamericanos.

Nacida en Guanajuato, México, fue traída por sus padres a Chicago a los 3 años de edad, se crió en el barrio mexicano La Villita y estudió en la Universidad de Illinois, para radicarse en Cícero después de su graduación en 1998.

Según el comunicado, en su pedido para ser incluida en la boleta de votación para las primarias del 26 de febrero, y la elección del 9 de abril, "presenté más firmas de votantes de Cícero que las necesarias".

"Tengo documentación donde los firmantes afirman su derecho de elegirme para intervenir en la elección", asegura.

Méndez, que se ha presentado como una voz independiente para lograr un gobierno abierto y transparente, confió en que durante la apelación "tendré oportunidad de presentar documentación adicional para permanecer en las boletas".

"Por lo tanto, sido adelante ganándome el apoyo de los residentes de Cícero, y seguiremos hasta la victoria", afirma en el comunicado.

De confirmarse la impugnación, solamente quedaría un candidato latino para enfrentar a Dominick, quien ha gobernado Cícero durante 7 años y busca la segunda reelección.

El también mexicoamericano Juan Ochoa, igualmente oriundo de Guanajuato, dijo por su parte que la candidatura de Méndez "tiene las mismas raíces que la mía", y destacó "un fuerte compromiso con la comunidad y el deseo de que los habitantes tengan un liderazgo honesto y efectivo".

"Como Lizveth, yo también comparto el sentimiento de que es tiempo de poner fin a los años de corrupción y fraude en la administración de Larry Dominick", dijo en un comunicado divulgado hoy.

Ochoa no ve posibilidades a la apelación anunciada por Méndez y se considera "el único latino en la contienda".

"Espero que Lizveth siga su trabajo para mejorar a Cícero, mientras que yo continuaré mi campaña para luchar por una agenda y un gobierno justo y eficaz", señala.

Ochoa, exinfante de marina y veterano de guerra, demandó a Dominick por intimidación y acoso a comienzo de diciembre.

En el escrito presentado en el Circuito de Cortes del Condado de Cook calificó de "organización criminal" al comité de campaña de Dominick, que estaría intentando evitar su candidatura.

El clima político de Cícero, enrarecido por denuncias, motivó la intervención del juez Edmundo Ponce de León, de la corte del Condado de Cook, quien en un acto sin precedentes reemplazó el mes pasado a los tres integrantes de la Junta Electoral.

Ese cuerpo estaba integrado por el propio Dominick y dos allegados, y el juez dictaminó que no podrían realizar un trabajo objetivo al tener "intereses personales y pecuniarios" en los casos que deberían dirimir.

Al igual que en el caso de Méndez, el actual Presidente Municipal también impugnó la candidatura de Ochoa por supuestos problemas con los requisitos de residencia en la ciudad, y en las firmas presentadas como respaldo.

Ochoa a su vez sostuvo que la nueva junta electoral debería eliminar a Dominick de la contienda, quien estaría impedido de buscar la reelección por denuncias de que le debería dinero al Municipio.