Exrepresentante de Comercio pide que se prohíban las armas de asalto

Carla A. Hills, que fue representante de Comercio de EE.UU. (1989-1993) bajo la presidencia del republicano George W. Bush, afirmó hoy que el Congreso debe renovar la prohibición de las armas de asalto, que caducó en 2004.

"Claro, tenemos la Segunda Enmienda en nuestra Constitución, pero el hecho es que tuvimos una ley que prohibía el envío de armas de asalto al exterior, lo prohibía, pero la dejamos caducar. ¿Por qué no renovarla?", dijo Hills durante un foro organizado por el Diálogo Interamericano, un centro de estudios políticos de Washington.

"¿Por qué razón estamos vendiendo armas de asalto cuando deberíamos estarlas prohibiendo? Todos debemos ponernos manos a la obra sobre este asunto", manifestó Hills, quien aconsejó trabajar de manera conjunta con autoridades locales, estatales y federales y con el sector privado.

Hills, una de las negociadoras del Tratado de Libre Comercio para América del Norte (TLCAN), hizo esas declaraciones durante el lanzamiento de un informe sobre la agenda bilateral de EE.UU. y México, preparado por la comisión del Diálogo que ella preside junto al expresidente mexicano Ernesto Zedillo.

El informe, titulado "Una agenda más ambiciosa", recomienda a ambos países profundizar la cooperación en áreas como la integración económica, el control de los flujos migratorios y la seguridad ciudadana.

Sobre el control de armas, el excongresista Jim Kolbe señaló que, durante un encuentro el martes, varios líderes republicanos moderados le indicaron que hay, al menos, un "amplio apoyo a la idea de la revisión de antecedentes penales para la compra de armas".

"Creo que veremos algún movimiento sobre ese asunto, porque no parece haber apoyo a la renovación de la prohibición de las armas de asalto. Tengo dudas de que eso (la renovación) vaya a ocurrir", manifestó Kolbe, exlegislador por Arizona.

Hills replicó que un reto clave será encontrar la fórmula para persuadir a la opinión pública de que apoye la prohibición de las armas de asalto, incluyendo conversaciones directas con los votantes mediante asambleas populares.

Mientras, Andrew Selee, director del Instituto de México del Centro Wilson, coincidió con Kolbe en que, ante el panorama político actual, la medida más viable en el Congreso sería la generalización de la revisión de antecedentes penales para la compra de armas.

"Probablemente no hay mucho que podamos hacer para frenar por completo el tráfico de armas, pero sí se pueden hacer cosas para hacerlo más difícil. La revisión de antecedentes probablemente le daría más herramientas a las autoridades policiales... y aumentaría el costo para los implicados en el crimen organizado de obtener armas", observó Selee.

El presidente, Barack Obama, ha propuesto una serie de medidas para frenar la violencia generada por las armas de fuego, a raíz de la masacre en una escuela primaria en Newtown (Connecticut) el pasado 14 de diciembre, en la que murieron de 20 niños y ocho adultos.

También la senadora demócrata por California, Dianne Feinstein, promueve una medida para renovar la prohibición de la venta de armas de asalto y cargadores de alta capacidad, pero desde el principio la iniciativa afronta gran oposición de grupos defensores de una interpretación estricta de la Segunda Enmienda, que consagra la tenencia de las armas en EE.UU.