LONDRES - El escultor británico William Turnbull, que se inspiró en las formas primitivas para desarrollar su trabajo, murió. Tenía 90 años.
Erica Bolton, de la firma de relaciones públicas Bolton & Quinn que promueve una próxima exposición de su obra, dijo que Turnbull murió el jueves. La causa de su muerte no fue dada a conocer.
Las obras de Turnbull con frecuencia eran de formas extremadamente simples que insinuaban máscaras o tótems. Sus esculturas fueron exhibidas en las prestigiosas galerías Hayward, Serpentine y Tate en Londres y en la Galería Berggruen en San Francisco.
El escultor británico Anthony Gormley describió a Turnbull como "un modernista radical que reconoce que la escultura proviene de su naturaleza arcaica".
Nacido en Dundee, Escocia, en 1922, Turner fue ilustrador de revistas antes de servir a la Fuerzas Aérea Real en 1942. Entre 1948 y 1950 vivió en París, donde tuvo contacto con artistas como Fernand Leger, Alberto Giacometti y Constantine Brancusi.
A Turnbull le sobreviven sus hijos Alex y Johnny.