Latina de origen mexicano quiere ser primera mujer presidente de Cícero

La hispana de origen mexicano Lizbeth Méndez anunció hoy su candidatura como la primera mujer que aspira a la alcaldía de Cícero, una ciudad anexa a Chicago habitada mayoritariamente por latinos.

"Quiero ser una voz independiente y siento que la comunidad me apoya", dijo hoy Méndez a Efe en una entrevista telefónica.

Aunque novata en la política, la inmigrante de 37 años afirmó que la mayoría de los 83.000 habitantes de Cícero, que en un 87 por ciento son de origen mexicano y centroamericano, "piden un cambio a gritos".

"Nos merecemos un mejor Cícero, y soy la mejor preparada para provocar ese cambio", afirmó.

Nacida en Guanajuato, Lizbeth fue traída por sus padres a Chicago a los 3 años de edad, se crió en el barrio mexicano La Villita y estudió en la Universidad de Illinois, hasta que después de graduarse en 1998 se radicó en Cícero.

Desde 2004 ha trabajado como enlace de la Procuradora General de Justicia de Illinois, Lisa Madigan, con la comunidad hispana, cargo del que se encuentra licenciada por seis meses mientras hace campaña.

La candidata, que hoy presentó la documentación en la Junta Electoral para ser incluida en las primarias y la elección del 26 de febrero de 2013, dijo que encara la campaña como representante de "todos los habitantes de Cícero", aunque reconoció las características del electorado.

En las últimas elecciones hubo 10.300 votos entre los 26.000 registrados en Cícero, y para la próxima se esperan 21.000 latinos entre los 27.000 registrados para votar.

"Reconozco la supremacía latina, pero quiero que me voten por ser la mejor y no solamente por ser paisana y la primera mujer que aspira al cargo", señaló.

Lizbeth Méndez dijo que "mi único contrincante es Larry Dominick", refiriéndose a quien ha gobernado el municipio durante 7 años y busca la segunda reelección.

"Quiero un gobierno abierto y transparente, y mi primera acción sería auditar el malgasto de fondos públicos y el nepotismo realizado por Dominick", dijo.

"Ha empleado a más de una docena de parientes en cargos para los que no están preparados, a pesar de que prometió combatir el nepotismo", afirmó.

Según Méndez, el actual Presidente Municipal perdió un juicio por acoso sexual y el Gobierno tendrá que pagar 640.000 dólares en compensaciones, además de ser responsable de despidos polémicos.

"Me parece injusto que los residentes tengamos que pagar esas compensaciones. Los votantes de Cícero queremos saber qué está sucediendo con los fondos públicos que el Presidente Dominick utiliza para promoción propia", agregó.

Su plataforma política también aboga por la prudencia fiscal, mejores oportunidades educativas para los jóvenes y la transformación del sistema escolar, además del fortalecimiento de la fuerza policial.

Méndez trabaja con un grupo de voluntarios y hace campaña puerta a puerta, "porque antes de pedir el voto quiero que la gente me conozca y vea la diferencia con los demás candidatos".

"Con mucho respeto, no se puede comparar, soy la mejor preparada porque acabo de obtener un MBA en administración", dijo.

En la lucha contra la maquinaria política de Dominick figura otro latino, el empresario mexicano Juan Ochoa, también originario de Guanajuato y novato en esas lides.

Cícero solamente fue gobernado por un hispano durante dos años y medio, cuando el mexicoamericano Ramiro González asumió en 2002 para completar el mandato de Betty Loren-Maltese, encarcelada por corrupción.

Luego fue derrotado por Dominick en la elección de 2005, por 150 votos.