Editorial

Con el inicio de año no solamente arranca una nueva sesión legislativa sino un periodo de campañas intensivas para varios puestos importantes en nuestro estado.

Entre los escaños en disputa está la gubernatura, puestos estatales y legislativos como el secretario de instrucción pública, el fiscal general y el secretario de estado.

Para algunos puestos ya se perfilan personajes conocidos en el mundo de la política como el ex procurador general y ex candidato a gobernador, Terry Goddard quien buscará la Secretaría de Estado. La senadora estatal Leah Landrum Taylor también busca ese escaño.

Mientras tanto el actual secretario de estado Ken Bennett buscará la gubernatura por el partido republicano al igual que el demócrata Fred DuVal, cuya carrera pública incluye haber trabajado en la Casa Blanca.

Pero lo refrescante siempre es ver caras nuevas, especialmente latinos buscando puestos públicos.

La Voz no apoya a ningún candidato en particular. Solo me parece importante informar a nuestros lectores de algunos latinos quienes han optado por servir a través de un puesto de elección.

David García hace algunos meses lanzó su campaña para jefe de las escuelas públicas de Arizona. John Huppental ocupa actualmente ese puesto y buscará la re-elección.

Esta semana, Marcelino Quiñónez formalmente anunció que buscará un puesto de Representante en el congreso estatal.

Quiñónez, de 31 años de edad, intentará ocupar la vacante del Distrito 27 que dejará la representante estatal Catherine Miranda, quien anunció que en el 2015 irá tras un puesto en el Senado estatal, según escribió nuestro reportero Samuel Murillo.

El Distrito 27 abarca parte del centro, sur y sureste del área metropolitana de Phoenix.

Quiñónez es actual miembro de la Mesa Directiva del Distrito Escolar Roosevelt en el sur de Phoenix.

Todos estos puestos son de suma importancia y todos debemos informarnos acerca de las posturas de cada uno de ellos para decidir quién es el mejor.

Usted tendrá la última palabra en las urnas. Si puede votar, hágalo. Si no puede, convenza a sus amigos y familiares a que lo hagan.